Tal y como se recoge en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía, "Los objetivos de esta Orden son, por tanto, limitar al máximo los contagios y mejorar el estado sanitario general de las poblaciones silvestres y la ganadería de Andalucía, compatibilizar la conservación de especies necrófagas y aplicar medidas de manejo que ayuden a mejorar las condiciones sanitarias, y la calidad cinegética en su conjunto, no sólo en el problema de la tuberculosis, sino también en otros problemas graves, bacterianos, víricos y parasitarios que pueden circular entre las especies silvestres y entre éstas y las domésticas, habiéndose entendido oportuna su promulgación conjunta por las Consejerías de Agricultura y Pesca y de Medio Ambiente y con el fin de reforzar la colaboración de estos departamentos en la consecución de los fines".
La Guía publicada es un documento que, sin duda, ayudará a los cazadores andaluces que cacen piezas de caza mayor en la interpretación de la normativa vigente en relación con los subproductos generados, principalmente vísceras, pieles y otros restos, así como el movimiento de trofeos, evitando sanciones por el desconocimiento de la compleja legislación existente y estimulando hábitos adecuados en el manejo de las piezas abatidas.
Desde Ciencia y Caza entendemos que se trata de una iniciativa muy oportuna por parte de la Federación Andaluza de Caza, puesto que se trata de un documento eminentemente práctico y de gran ayuda para todos los agentes que participan en la organización, gestión y aprovechamiento de la caza mayor en esta Comunidad Autónoma. Además, es un buen ejemplo a seguir para otras Comunidades Autónomas, tanto para las Administraciones, como para las Delgaciones Autónomicas de Caza correspondientes y para todos los amantes de la caza mayor puesto que en muchos aspectos la buena salud de nuestras especies depende de manejos adecuados y sencillos por parte de todos.
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Fuente: https://www.cienciaycaza.org/ver_actualidad.php?id=222
